Empresas: La cultura de la capacitación permanente

Contratar, retener e integrar el equipo de trabajo no es algo que ocurra naturalmente, es el resultado de una planificación que permite a los empleados tener una carrera y a la empresa tener personal motivado y eficiente en cada una de las labores ¿cuántas veces respondimos a una necesidad de capacitación a demanda de uno de los empleados o de una situación nueva que nos sorprendió por completo?

Las actividades de team building y las distintas estrategias pensadas en RRHH cubren una parte de las necesidades de la empresa. Cuando planificamos nuestro capital humano tenemos el deber de ver más allá de nuestro día a día. El riesgo de no hacerlo es no responder a la demanda de un empleado con la capacitación que la empresa requiere o, peor aún, no ver los cambios necesarios a producir en nuestro propio personal hasta que ya es demasiado tarde.

La capacitación permanente requiere planificación, consensos y también presupuesto; el esfuerzo vale la pena, el resultado es gente más apta para sus tareas, que requiere menos supervisión, que comete menos errores, que sufre menos accidentes, que se identifica con la empresa porque siente que se interesan por ellos. Un programa de capacitación permanente tiende a bajar los costos de la empresa y a mejorar sus oportunidades con respecto a la competencia.

Las jornadas de capacitación

Las empresas, dependiendo de su envergadura y necesidades hacen inversiones que van desde el pago de posgrados hasta las jornadas de capacitación. Si bien son dos formas de sumar capacidades al personal, estas dos modalidades no compiten entre sí, sino más bien se complementan.

Los workshops, son instancias de capacitación no formales que están destinados a cubrir necesidades inmediatas de la empresa, mientras que la capacitación formal se deja para capacitar a aquellos cuadros destinados a tener un conocimiento técnico avanzado y/o una visión estratégica global que le permita visualizar e intervenir en distintas situaciones.

Las distintas formas de capacitación corta han ganado terreno a través de lo años de la mano de la aceleración de los cambios tecnológicos y de las lógicas de trabajo, la aparición de nuevos roles y la adecuación de los roles tradicionales a nuevas formas de administrar, vender o gerenciar.

¿Qué requerimos para implementar capacitaciones cortas?

El personal adecuado para la capacitación que debe diseñar las actividades junto al departamento de RRHH y la persona a cargo del área a capacitar.

Una capacitación a medida debe hacerse en un lugar adecuado. Un salón con capacidad suficiente para armar paneles y mesas de trabajo, dónde pueden desarrollarse distintas actividades en un ambiente que permite concentrarse y sea ameno para pasar la cantidad de horas que la capacitación requiera.

Un catering adecuado y todos los servicios que el personal requiera durante las jornadas de capacitación

Desde la sala Siranush te invitamos a consultar todas nuestras opciones para tus próximas jornadas de capacitación ¿Querés dejarnos un comentario? Estamos esperando tus consultas.

Related Posts
Leave a Reply